La red Migrantes con Derechos denuncia la falta de coraje político para abordar los retos de la movilidad humana en nuestro país Ante la celebración del Día Internacional del Migrante y una semana después de la ratificación en Marrakech por parte de más de 150 países del primer Pacto Mundial para la Migración Segura, Ordenada y Regular, las entidades que integramos la red Migrantes con Derechos –Cáritas, CONFER, Justicia y Paz, y la Comisión Episcopal de Migraciones— reafirmamos nuestro apoyo el éxito de la comunidad internacional para avanzar en el objetivo de gestionar los flujos migratorios a nivel global. Lamentamos, sin embargo, el fracaso que supone la retirada del Pacto de varios países del Norte, cuya decisión abre una peligrosa grieta en el espíritu de unidad y solidaridad tan necesario para garantizar una acción coordinada, por encima de fronteras y políticas nacionales, en la tarea inaplazable de proteger las vidas y los derechos de los migrantes y refugiados. Recordamos que la celebración de hoy conmemora la adopción, por parte de la Asamblea General de las Naciones Unidas, de la Convención Internacional para la protección internacional de los derechos de todos los trabajadores migrantes y sus familiares, un texto que ni España ni ninguno de los Estados miembros de la Unión Europea han firmado todavía. Queda mucho camino por recorrer para hablar de una migración que sea auténticamente segura, ordenada y regular, y evitar que el Pacto recién alcanzado se convierta en papel mojado. Instamos, por ello, a corregir el rumbo preocupante que, a pesar de las buenas intenciones proclamadas en Marrakech, manifiestan las decisiones políticas en materia de migración que se siguen adoptando tanto en nuestro país como en el conjunto de la Unión Europea. Una vez más, censuramos unas políticas migratorias donde el enfoque basado en la seguridad y el control de fronteras sigue primando sobre los aspectos humanitarios y sociales, y que convierten las vallas y las aguas del Mediterráneo en espacios de muerte, sufrimiento y vulneración de derechos, en lugar de transformarlos en una oportunidad para la acogida y la hospitalidad. Decimos no a las devoluciones de migrantes realizadas sin las garantías establecidas en los procedimientos relativos a la identificación de cada persona, sin verificar sus circunstancias personales o sin prestar información en un idioma que sea entendido por las personas recién llegadas. Y no a que se perpetúen los mismos errores en los que incurren ahora unos responsables políticos que denunciaban esas prácticas cuando estaban en la oposición y que prometían erradicarlas. Reclamamos coraje político para acabar con el limbo legal que afecta a un número creciente de menores inmigrantes no acompañados, al tiempo que denunciamos la resistencia a movilizar los recursos indispensables para financiar tanto la acogida e integración en nuestro país de los migrantes como para incidir en las causas del problema mediante una adecuada dotación de fondos para la Ayuda Oficial al Desarrollo. Rechazamos la escandalosa política de brazos caídos por la que se abandona a su suerte en aguas internacionales a pesqueros españoles que, dando ejemplo de sentido humanitario, auxilian embarcaciones con migrantes a punto de zozobrar. Y decimos rotundamente no a la sucesión de irresponsables declaraciones públicas en contra de las personas migrantes, que, con un peligroso acento discriminatorio, racista y xenófobo, pretenden obtener apoyo electoral a base de difundir falsos rumores y prejuicios que sólo buscan estigmatizar al otro e intoxicar la convivencia social y las relaciones en nuestros barrios. Como alertaba en septiembre pasado el Papa Francisco en el congreso mundial sobre racismo y xenofobia organizado por la Santa Sede y el Consejo Mundial de las Iglesias (WCC), «vivimos tiempos en los que parecen reavivarse y difundirse sentimientos que muchos consideraban superados. Sentimientos de sospecha, de miedo, desprecio y hasta de odio frente a individuos o grupos considerados diferentes a causa de su origen étnico, nacional o religioso y, como tales, no considerados lo suficientemente dignos de participar plenamente en la sociedad». «La gravedad de estos fenómenos –añadía el Papa— no puede dejarnos indiferentes. Todos estamos llamados, en nuestras respectivas funciones, a cultivar y promover el respeto de la dignidad inherente a toda persona humana, empezando por la familia, el lugar en el que se aprenden desde muy temprana edad los valores de compartir, de la hospitalidad, de la hermandad y solidaridad». Como entidades de Iglesia que acompañamos a los migrantes compartiendo sus esperanzas y frustraciones, defendemos un modelo de convivencia basado en la convivencia intercultural, en la integración y en la acogida fraterna al que llega y se encuentra en situación de mayor vulnerabilidad. Somos Iglesia samaritana que auxilia al desvalido, sin preguntar por su origen, su credo o su condición. En vísperas de la Navidad, cuando conmemoramos el nacimiento en Belén de un Niño cuyos padres fueron excluidos porque no tenían sitio en la posada y empujados luego al exilio, urgimos a nuestras comunidades y a todos los ciudadanos a examinar sus actitudes personales y comunitarias, y a renovar su capacidad de acogida y hospitalidad hacía las personas migrantes. El Amor, que todo lo puede, es la mejor respuesta a quienes sólo parecen dispuestos a enrarecer la convivencia en paz. Documento para descargar, aquí
Teatro breve: Historias detrás de la valla «Historias detrás de la valla» es una propuesta que une el ámbito de la cooperación a un equipo artístico creador para la escritura, realización y montaje de una serie de piezas teatrales que sensibilicen, informen y aporten nuevas miradas frente a la situación actual de los movimientos migratorios hacia los países europeos. Fecha: 28 de septiembre, de 18.00 a 19.30. Obras a representar (cada obra tiene una duración de 20 minutos): «Passport», «Mi casa es una maleta», «El Paso» y «¿De qué país eres tu?» Lugar: Salón de actos de Arrupe Etxea. Imprescindible Inscripción: https://labur.eus/DSvCC
La Fundación Ellacuría es parte del Servicio Jesuita a Migrantes y del Sector Social de la Compañía de Jesús en España. Nos hacemos eco del Comunicado desde la Campaña de Hospitalidad, en la que participamos. NOTA DE PRENSA: LUNES 18 DE DICIEMBRE: DÍA INTERNACIONAL DE LAS PERSONAS MIGRANTES
Compartimos la Nota de Prensa que desde Hospitalidad.es sobre la situación de las personas solicitantes de refugio en las fronteras europeas, y la falta de cumplimiento del compromiso de la Unión Europea, en la reubicación y reasentamiento de estas personas.
«La Campaña de Hospitalidad busca promover una cultura de solidaridad e inclusión con las personas migrantes y refugiadas a través de la acción conjunta de las obras y comunidades de la Compañía de Jesús en España abordando cuatro áreas: acogida, sensibilización social, incidencia y cooperación internacional. De este modo, la campaña conecta el “aquí” con el “allí”, construyendo un relato que abarca las causas estructurales de los fenómenos de movilidad humana con lo que acontece en nuestras comunidades: las dificultades que viven las personas migrantes para su integración y participación en nuestra sociedad, y las iniciativas que favorecen nuevas relaciones de solidaridad, encuentro y convivencia.» Os compartimos aquí una experiencia, en una comunidad de Otxarkoaga,(Bilbao), en la acogida de una madre y su hijo. Hablan las protagonistas: «Desde hace tres semanas nuestra comunidad ha aumentado en dos miembros. Seguro que os preguntáis quienes son. Ahora mismo os lo explico. Ella es Nubia, una mujer de 34 años, de Honduras. Trabaja como limpiadora en una clínica veterinaria a media jornada. La vida en su país no le fue fácil. Tampoco ahora lo es en España 10 años después. Tiene grandes deseos de formarse y aprender todo lo posible. Hace un mes tuvo que dejar el piso donde vivía obligada por las circunstancias y desde entonces vive con nosotras hasta que encuentre una nueva vivienda. Su hijo, Jonathan, de 9 años, nació ya en España, de padre peruano. Va a un colegio del centro de Bilbao. Cada mañana, como su madre va muy temprano al trabajo, somos nosotras, cada una por turno, las que nos encargamos de despertarle, hacer que desayune y se prepare para ir a las 8 al colegio. Es un chaval que sabe reflexionar y buen estudiante. Además de ver los dibujos animados, le gusta jugar a la oca, al parchís etc. Todo esto hace que recordemos un poco lo que supone en las familias tener un niño en casa, con sus risas, sus enfados, su inocencia, sus caprichos, su cariño, etc. también nos hace pensar lo que dijo Jesús: «el que acoge a uno de estos niños, a Mí me acoge «. ¿Qué puedo decir sobre lo que esta oportunidad ha supuesto para nosotras? Simplemente, que intentamos hacer un poco lo que Él hizo a lo largo de su vida: ser humanas, acoger a quien lo necesita y procurar que se sientan a gusto y queridos en su nuevo ambiente. Su presencia nos «obliga» a olvidarnos un poco de nosotras mismas y de nuestros pequeños problemas de cada día. Al mismo tiempo esta convivencia nos ayuda a conocer más de cerca los problemas de tantas personas que, por circunstancias diversas, se han visto obligadas a salir de su país en busca de una vida mejor y más digna, y a darnos cuenta de que continúan encontrándose con grandes problemas de de acogida, trabajo y vivienda, aún después de muchos años. Nubia y Jonathan nos están enseñando a saber compartir: vivienda, comida, tiempo y sobre todo, cariño. Pienso que esta ocasión es una Gracia de Dios para nosotras. Y nos impulsa cada día a despertar y a realizar en nuestras vidas esos deseos – a veces dormidos -, de contribuir a la construcción de un mundo más justo y humano. No quiero alargarme más. Solamente, terminar diciendo de nuevo, que esta experiencia vale la pena vivirla con todo entusiasmo». Para más información sobre la campaña “Hospitalidad” visita la web www.hospitalidad.es
Hemos tenido una primera experiencia de hospitalidad. Os la contamos: Como a todas las personas con un poco de inquietud de Evangelio, las imágenes y noticias sobre emigrantes y refugiados, que nos llegan por los medios de comunicación social producen inquietud, responsabilidad y… provocan deseos de pasar del saber al hacer algo, a compro-meternos con algo a nuestro alcance.…
Os compartimos nuestro resumen de actividad de la Fundación Ellacuría del año 2016. Lo hemos preparado en dos formatos: infografía euskera – castellano y vídeo. Ambos intentan resumir los datos principales de nuestra actividad, recogida en datos e imágenes, para mostrar el trabajo que hacemos entre personal y voluntariado. Siempre coordinadas con nuestras entidades aliadas, dentro de SJM y la familia ignaciana. Esperamos que os guste, y la compartáis. Nos seguimos viendo en el camino!
INFORME CIE 2015 Es posible que el año 2015 sea recordado como aquel en el que la Unión Europea y sus estados miembros dieron definitivamente la espalda a cientos de miles de personas refugiadas. Después de un tímido ensayo de organizar una respuesta mínima y corresponsable, basada en la acogida, se produjo una escalada en las políticas de hostilidad y portazo. Se tomaron medidas para obstaculizar al máximo la llegada a Europa de personas, se cerraron fronteras nacionales para hacer imposible el tránsito entre países y se endurecieron legislaciones para dificultar el acceso a derechos. Todo ello, coronado con la pasividad – sino indiferencia- y desesperante lentitud a la hora de cumplir con los ya de por sí rácanos compromisos de reubicación y reasentamiento. Y como paisaje de fondo, un discurso público que transita entre el miedo y el populismo xenófobo más estridente. Vemos, por tanto, que algunas viejas recetas que ya han mostrado su inoperancia – además de su falta de respeto por la dignidad de las personas- se actualizan y amplían. Dichas recetas tienen dos componentes esenciales: el endurecimiento del control fronterizo y la detención de las personas migrantes. El primero, lejos de cumplir con su pretendido objetivo de “frenar los flujos” migratorios, los desvía hacia rutas más difíciles y peligrosas, y hace más próspero el negocio de la “mafias”. Y ello, sin mencionar la degradación ética y política que suponen determinados acuerdos de externalización de fronteras con países de dudoso compromiso con los derechos humanos, cuando no de claro desprecio hacia ellos. El segundo – la detención- nos introduce de lleno en un mundo de excepcionalidad jurídica, donde personas sin otro delito que el de buscar un futuro a salvo, son recluidas o ven sus libertades seriamente restringidas. Esto no tiene justificación. Queremos con estas líneas, pues, ayudar a abrir el zoom, y situar los centros de detención de migrantes (CIE, en el caso español) como dispositivos de control fronterizo. Y llamar la atención de que nos encontramos en un momento de endurecimiento de estos. Sitúese en este contexto también el intento de legalizar las llamadas “devoluciones en caliente” por parte del gobierno español durante este pasado año. La conclusión es que abogar por el cierre de los CIE en este caso, implica también abogar por una reforma en profundidad de todo el entramado de control fronterizo. Por un replanteamiento amplio de la forma en que gestionamos la movilidad humana. No obstante, en este texto nos toca cerrar de nuevo el zoom, y concentrarnos en la realidad de los CIE en España. Partimos de nuestra experiencia de acompañamiento en tres de ellos, y nos basamos en más de 1.500 visitas. Miramos, esta vez con especial atención, desde el prisma de las personas más vulnerables entre las vulnerables: personas enfermas, víctimas de trata, solicitantes de asilo, personas a quien nadie visita… Nuestra conclusión es que por la gravedad que supone la privación de libertad, por el abuso que se hace de esta medida y por las condiciones de vida realmente existentes en los CIE es necesario afrontar su cierre y desaparición. Y en el entretanto, continuar con el debate público – felizmente intensificado en los últimos meses- e ir poniendo en marcha alternativas a la privación de libertad, que las hay. Miguel González Martín Coordinador del Servicio Jesuita a Migrantes – España
¿Qué son los círculos del silencio? El Círculo de Silencio es una acción no-violenta en solidaridad con las personas migrantes que comenzó a realizarse en Toulouse a finales de 2007 y actualmente reúne en Francia a unas 10.000 personas de distinta procedencia, en más de 170 ciudades una vez al mes. Así mismo, se han sumado más ciudades y países de Europa y África. Concretamente en el País Vasco, se realizan en Vitoria y San Sebastián. Se trata de un movimiento ciudadano que considera que la situación en la que viven muchas personas es extremadamente precaria y apela a la conciencia de quienes hacen las leyes, de quienes las aplican y de aquellos en cuyo nombre son hechas, para hacer posible una política más respetuosa con la dignidad de las personas. También pretenden ayudar a tomar conciencia, interiorizar y ser un elemento de interpelación a la sociedad sobre la situación de extrema gravedad que muchas personas sufren en Europa. -Lugar: Plaza Arriaga -Fecha: último miércoles de cada mes. -Hora: 19.30-20.00 Los círculos pretenden reimplementar una cultura no-violenta a través de una acción accesible a todo el mundo, en una actitud de respeto frente al que sufre y con la intención de abrir la mirada de la sociedad en el apoyo a estas leyes injustas. Objetivos: • Denunciar las injusticias que sufren las personas migrantes empobrecidas desde la realidad social. • Ser lugar de referencia para poder encontrarse con realidades injustas, personalizarlas desde el silencio, y denunciarlas públicamente. • Potenciar la transformación social y personal. ¿A quién convoca? A todas aquellas personas, grupos o entidades que ven la necesidad de unirse para enfrentarse a unas leyes que están vulnerando la dignidad de las personas inmigrantes. ¿Quiénes convocan? Cáritas Bizkaia Fundación Ellacuría Asociación Bidesari Diócesis de Bilbao Oblatas – Leiho Zabalik Plataforma Culturas Unidas Invitamos a la ciudadanía y a los distintos grupos y organizaciones sociales a participar en esta iniciativa acudiendo los últimos miércoles de mes a la plaza del Arriaga de 19.30 a 20.00 horas. Aquellos grupos y organizaciones sociales que queráis apoyar/adherirse a esta iniciativa, o participar en la organización de los “Círculos de Silencio Bizkaia Isilik”, enviad un correo electrónico al siguiente mail: circulos.bizkaia@gmail.com
¿Qué está pasando? La guerra, los conflictos, el cambio climático, la violencia, la pobreza y la desigualdad causan desplazamientos de población Compartimos con vosotras este documento, que es a la vez reflexión y denuncia, exigencia de cambio y llamado a la solidaridad y la hospitalidad. Esperamos que podáis compartirlo, y difundir a la sociedad las verdaderas causas de estos desplazamientos desgarradores. Hay que seguir denunciando para que la comunidad internacional, y las decisiones políticas, cambien de rumbo y cumplan con la leyes vigentes. Puedes leer el manifiesto completo en castellano aquí: http://bit.ly/manifiesto_es y en euskera aquí: http://bit.ly/manifiesto_eus